La disposición para la escolarización no considera unicamente la características indiduales del niño, si no que es un concepto abarcativo que incluye también el ambiente en el que el niño se desarolla y en el cual se encuentra immerso. Según un informe de UNICEF, la disposición para la escuela debe ser entendida en tres dimensiones: “la preparación de los niños para la escuela; preparación de la escuela para niños; y la disposición de las familias y las comunidades para ayudar a los niños a hacer la transición a la escuela” (UNICEF, 2012). Apuntar a la mejora de la calidad de los ambientes, familiar y educativo es un paso esencial para promover la igualdad entre los niños/as que asisten a los distintos centros del país.

Ambiente educativo, disposición para la escolarización y el Inventario de Caracterización de Ambientes.

Dentro del concepto de calidad de ambientes educativos en primera infancia se incluyen elementos estructurales como el estado material del salón de clases o la cantidad de niños por grupo, elementos procesuales como el tiempo dedicado a actividades pedagógicas o el vínculo docente-niño y elementos relacionados a los sistemas continuos de mejora que el centro tenga en funcionamiento, además del vínculo entre el centro y la familia. Muchas investigaciones han hallado que mejoras en estos aspectos llevan a mejora en el desarrollo y el aprendizaje infantil.

Como en todo proceso, para conocer en qué lugar se está parado y ponerse objetivos de mejora, un primer paso es generar formas de evaluación y caracterización de la situación. En este sentido, fue creado en 2016 el Inventario de Caracterización de Ambientes para Educación Inicial (INCA-EI), un instrumento para evaluar las dimensiones estructurales y procesuales del ambiente escolar. Hasta ese momento, Uruguay no contaba con instrumentos nacionales para evaluar de forma válida y confiable las particularidades del ambiente en instituciones de educación inicial.

El INCA-EI tiene dos fuentes de información: una observación directa no participante y una entrevista semiestructurada breve que se realiza al docente a cargo de salón. Está compuesto por un total de 71 ítems divididos en dos dimensiones: Estructura y Proceso. Posee estudios de confiabilidad y validez realizado en más de 140 escuelas y jardines de educación inicial pública de Uruguay (ver más).

La adaptación cultural y contextual a las instituciones, el ahorro de recursos económicos en cuanto a la adquisición de materiales de aplicación y capacitaciones a los evaluadores y la posibilidad de mejora continua y la participación de actores nacionales son solo algunos de los beneficios que contar con el INCA-EI como instrumento nacional puede generar para trabajo sinérgico entre profesionales de la educación e investigadores.

Por información más detallada de este instrumento acceder a: https://www.cicea.ei.udelar.edu.uy/inca-articulo-2/

Ambiente familiar y disposición para la escolarización

La evaluación del contexto familiar puede ser abordada a partir de diferentes perspectivas y niveles de análisis en función del outcome o resultado de interés (e.g. desarrollo socioemocional, desempeño académico, salud mental, etc.). Cuando pensamos la relación entre el ambiente familiar, el desarrollo infantil y la preparación para la escuela podemos delimitar la importancia de una serie de aspectos específicos referidos a la frecuencia y tipo de prácticas de estimulación en el hogar, que se encuentran además vinculados a las expectativas y creencias de los adultos sobre el desarrollo y la escolarización, y las características psicológicas de las personas responsables de cuidados.

El Inventario de Caracterización del Ambiente del Hogar para la Promoción del Desarrollo Infantil es una escala de autoreporte de cuidadores de niños entre 3 y 6 años versionada para el contexto uruguayo. El instrumento tiene origen en la conceptualización del sistema de evaluación del contexto familiar HEFAS  conjugado con con la dimensionalidad del desarrollo propuesta en el INDI. La escala aborda la estimulación del desarrollo en distintos dominios, así como algunos aspectos referidos al bienestar psicológico del adulto en su rol de cuidador. Este instrumento se encuentra actualmente en proceso de validación para el contexto uruguayo como parte del proyecto ANII de posgrado “Calidad de ambiente de desarrollo y su influencia sobre las habilidades cognitivas en la Primera infancia”.

De esta forma se pretende aportar un instrumento de colecta ágil para la evaluación sistemática y estandarizada del ambiente del hogar. Contar con este tipo de caracterización permitirá a futuro diferenciar y delimitar las necesidades de intervención de distintos segmentos poblacionales, así como articular la información sobre calidad del ambiente familiar, calidad de ambiente educativo y desarrollo infantil.

Por más información puede consultar https://indi.ei.udelar.edu.uy/proyectos/